"No hago diferencia entre lo real y lo fantástico. Para mí, lo fantástico procede siempre de lo cotidiano. Un escritor de verdad es aquel que tiende el arco a fondo mientras escribe, y después lo cuelga de un clavo y se va a tomar vino con los amigos. La flecha ya anda por el aire y se clavará o no se clavará en el blanco; sólo los imbéciles pueden pretender modificar su trayectoria o correr tras ella para darla empujoncitos suplementarios."
Antología del Cuento Literario
Editorial Alhambra (1988)
Selección y edición de Miguel Díez Rodríguez
Editorial Alhambra (1988)
Selección y edición de Miguel Díez Rodríguez
No hay comentarios:
Publicar un comentario